Hijo de los archifamosos literatos-poetisos
Elizabeth Barrett y Robert Browning,
dicen que no se le daba bien el colegio, ni las aficiones de sus padres..,
pero tuvo los mejores maestros y, lograron que supiera pintar... desnudos.
desgraciadamente la carga del apellido pudo, como con muchos, mas que su
propia hacer, se le cita como un experto en grandes murales, lonas
inmensas con desnudos, pero su apellido le infravaloró tanto, que gran parte de
su obra está perdida.