Ercole Ferrarés
Pintor
Biografía de : "las vidas de los mas excelentes arquitectos, pintores y escultores italianos desde Cimabue a nuestros tiempos", descritas por Giorgio Vasari, Edición Torrentina de 1550
Aunque florecieron en la Toscana en cada tiempo talentos maravillosos en las pinturas, sin duda en las otras provincias de Italia, que de esto oían, siempre surgía alguna persona que en el arte sobresaliese. Y ciertamente dónde no hay estudio y los hombres inclinados acostumbren a aprender, no puede la gente lograr pronto cosas de elogio ni con la misma excelencia y maestría. Pero cuando en tales ciudades se vuelve alguno excelentes, es considerado por el pueblo y admirado, por la poca cantidad que el país de ellos produce, como se admiró y fue tenido realmente como excelente a Ercole de Ferrara pintor, que se hizo en el taller de Lorenzo Cossa. muy estimado en su tiempo, que hizo infinitas obras en Ferrara y por toda la Lombardía y en Bolonia máxime, dónde llamado por Micer Giovanni Bentivogli pintó muchas habitaciones y muchas salas en el palacio de este, que por ser derruido luego, no merecen decirse; y la capilla de San Iacopo (#) con dos triunfos (#),(#), tenidos entonces en esta ciudad como una cosa muy excelente. Trabajó aún en Rávena, en la iglesia de Santo Domingo, la tabla al temple y la capilla de San Sebastián al fresco; y en Ferrara su patria, el coro de Santo Domingo al fresco, y muchas otras obras al temple que no están para hacer memoria. Y en la Misericordia de Bolonia hizo algunas pinturas. Pero particularmente en San Juan al Monte de esta ciudad hizo a un tabla con la virgen y algunos santos alrededor (#), que se terminó en el año 1497. Y cosas en San Petronio en una capilla un tabla al temple, que se conoce (como el políptico de la capilla Griffoni, Francesco del Cossa #, #,#,#,#,#, + Ercole de Roberti #,#,#,#,#,#,#,#,#) en la manera, con una predela debajo, con pequeñas figuras hechas con gran diligencia.
Bajo la tutela del Cossa pues, mientras que estaba contando con gran crédito, algunos Ferrareses lo pusieron a aprender sus técnicas en el arte a Ercole, entonces un modesto joven, de agudo talento. El cuál, para alcanzar este grado que deseaba ardientemente, estudiaba de continuo dia y noche, y pasando muy poco tiempo alcanzó al maestro en dibujo; pero por el respeto que él le tenía, no lo dejó nunca, y continuó a su servicio hasta la muerte del Cossa, con trabajos y malestar casi increíbles.
Venida la muerte de su maestro, que trabajaba entonces en la capilla de Garganelli en San Pietro de Bolonia, lo buscaron los dueños de esta, para saber si podría conducirla a la perfección con la que Cossa la había proyectado.
Por lo que Ercole lo tomó de buena manera, y se convino pagarle cuatro ducados al mes, y lo que gastara él y para un mancebo, y los colores que en tal obra tenían que ponerse. Donde Ercole, compitiendo con la obra que el Cossa había hecho en el ábside, lo pasó dibujando en gran parte, en colorido y en invención. (Destruida en 1605, para reconstruir la catedral. Solo queda un fragmento, #). Pintó en una pared la crucifixión de Cristo, la historia está muy acabada y hermosa, donde se ven figurados entre otros a Cristo muerto, y el tumulto de los judíos llegados a ver al mesías en la cruz, y entre éstos, una diversidad de cabezas muy grande, estudiando y buscando de hacerlas diferentes unas de otras, cada una de una manera determinada. Y les hizo una que realmente rompe a llorar de dolor, donde muy claramente muestra cuanto pretendía imitar la verdad. Está desvaneciéndose la Virgen que resulta muy piadoso, pero mucho mas compasión está en las Marías ayudando a aquella, viéndose en ellas en el rostro tanto dolor, cuánto es dado posible de imaginarse por morir lo más querido que se tenga, y estar muriendo la segunda. Pero entre las otras notables cosas que hay, está un Longinos a caballo sobre un animal seco en escorzo, que tiene gran relieve; y en él se conoce la crueldad en haberle abierto el costado a Cristo, y la penitencia y conversión tras encontrarse iluminado. Del mismo modo en extraña aptitud figuró a algunos soldados quienes se jugaban la túnica de Cristo, con gestos bizarros en las caras. Hay muchísimas figuras, los ladrones en la cruz atados, y los soldados que les rompen las piernas, los cuales tienen aspecto y fuerza que casi no se puede hacer mejor, y en los que muestra cuanta inteligencia tenía, superando las dificultades del arte. Hizo aún en la pared de enfrente el Transito de la virgen, donde está rodeada de Apóstoles, con aptitudes muy bonitas; entre los cuales retrató a seis personas del natural tan bien, que quienes los conocieron, afirman que son como vivos. Se retrató incluso así mismo en tal obra y a los propietarios de la capilla, que por el amor con que la llevó y por el renombre que de esta obra consiguió, terminada que fue, le ofreció mil liras de boloñesas. Dicen que Ercole tardó 12 años en terminar la obra: siete en llevarla al fresco y cinco para retocarla en seco.
Dicen que Ercole en el trabajo era muy supersticioso, porque cuando trabajaba tenía mucho cuidado que ningún pintor ni persona lo viera. Era muy odiado de los pintores boloñeses, los cuales a los forasteros siempre los han despreciado, y tenido mucho odio, dándose muchas peleas entre ellos, porque se encerraron con un carpintero, algunos pintores en la iglesia cerca de la capilla que hacía, y a la noche, en aquélla entraron a la fuerza, y le robaron todos los cartones, los bocetos y los dibujos. Por lo que Ercole se enfadó, de manera que terminada la obra, salió de Bolonia y se llevó de esta ciudad al Duca Tagliapietra, escultor así llamado, el cual en dicho trabajo que Ercole pintó, talló de mármol unos bonitos follajes en el parapeto delante de la capilla, y en Ferrara hizo todas las ventanas de piedra en el palacio del Duque, que son muy bonitas. Harto de estar fuera de su casa, se volvió a Ferrara en compañía de el. E hizo para esta ciudad otras obras sin número.
Era Ercole persona a la cual le gustaba mucho el vino, y a menudo se emborrachaba, siendo causa de acortase su vida, que llevó libre sin ningún mal hasta los 40 años. A continuación contrajo un dia "la gocciola" (no es la gota,..., algún tipo de ictus o infarto cerebral, En Pierino del Vaga repite la prontitud), de manera que a las pocas horas se retiró de la vida. Y de un amigo, no mucho después, se le hizo este epitafio:
HERCVLES FERRARIEN(SIS) INGENIVM FVIT ACRE MIHI SIMILESQVE FIGVRAS NATVRAE EFFINXIT NEMO COLORE MAGIS.
Aprox: Ercole Ferrarés, de ingenio agudo fui, sin que nadie pintase figuras naturales en color tan parecidas.
Dejó a Guido Bolognese pintor como discípulo, que creció a su sevicio, que bajo el pórtico de San Piero en Bolonia hizo al fresco un cristo crucificado, con los ladrones, caballos, soldados, y las tres Marías. Y porque deseaba sumamente ser considerado en esta ciudad como su maestro, estudió tanto y se sometió a tanto malestar, que se murió a los 35 años. Y si se hubiera enterado del arte desde la niñez en vez de en la juventud, como hizo a los 18 años, no solamente lo hubiera alcanzado sin muchos cansancios, lo hubiera pasado de lejos.